Merry whatever

Crecer en familia atea, no haber recibido la santa hostia ni mucho menos el agüita sagrada (aunque hay fuentes que indican que sucedió en el fregadero de la cocina con una cazuela al mando de la abuela sí beatilla) significa que las Navidades han sido y son sinónimo de Vacaciones con Frío, regalos, recogimiento moñas y, aquí viene lo personalmente chachi, Año Nuevo.

No sé qué leches tiene el 31 de Diciembre, que a mí me encanta. Una especie de mezcla estúpida de incertidumbre y necesidad de resumir 365 días pasados que... con alta probabilidad serán bastante parecidos. That's my faith. No, en realidad la cosa va de esperar algo emocionante, un looping de montaña rusa de esos que, en cuanto acaban, si te sientas en una silla cual vegetal... mal.

Caso es, que hoy es día de poner esta canción, y ya está. Oi!



"If God came down on Christmas day, what would he think?
what would he say?
Would he notice all we've done?
Or just the battles seldom won?
I think I know what God would say, if he came down on Christmas Day.
He'd say to every boy and girl,
'Where's the Oi I gave to the world?"