En el que el 2009 Se Pasó de Listo

Ésto ha sido el 2009.


Exactamente eso.

The fact

You're the thing you're kissing. I wish it wasn't a metaphor. I miss you so fuckin' much I don't even want to start 2010 without it, understood as touching, inhaling, realizing, feeling it more, and more, and more.

How could you not love this shit?

Será que se acerca el 31, será que tengo unas ganas tan brutales de dar por culo al 2009 que no quepo en sí de gozo por mandar metafóricamente la mala hostia lejos pero a ningún sitio, será que aún estoy en los veintidós, será que soy tía, será que tengo dos dientes torcidos, será que me sudan las cosas de forma mucho más preocupante que hasta hace seis meses, será que me cansas, me cansais, me cansarán; será que los putos bichos siguen apareciendo en cuanto duermes la primera noche en casa, será que entonces te das cuenta de la cantidad gigantesca de cosas que no aguantas, serán los 800 kilómetros y que eres lo único que me ha demostrado algo bueno en 365 cortos días, será que si no salgo a hacer como que me divierto a base de incomodidad me importa un bledo, será que tu obsesión por mi persona esté fuera de contexto, será que si me trago vuestra puta mierda de carrera estructurada a base de Ojete de Motivación es porque lo que menos me apetece es conocer al ser humano, será que siempre queda Nirvana entre otros ochocientos mil para momentos así, y la simpleza de estar cabreado no vas a ser tú quien me la discuta.

Joder, qué puto temazo adrenalínico.

"Mamá, esa niña dice muchas palabrotas..." "Jo tía, qué violenta eres..." A zampar coliflores un rato, please.

Replacing

Desde la ventana del salón.

Merry whatever

Crecer en familia atea, no haber recibido la santa hostia ni mucho menos el agüita sagrada (aunque hay fuentes que indican que sucedió en el fregadero de la cocina con una cazuela al mando de la abuela sí beatilla) significa que las Navidades han sido y son sinónimo de Vacaciones con Frío, regalos, recogimiento moñas y, aquí viene lo personalmente chachi, Año Nuevo.

No sé qué leches tiene el 31 de Diciembre, que a mí me encanta. Una especie de mezcla estúpida de incertidumbre y necesidad de resumir 365 días pasados que... con alta probabilidad serán bastante parecidos. That's my faith. No, en realidad la cosa va de esperar algo emocionante, un looping de montaña rusa de esos que, en cuanto acaban, si te sientas en una silla cual vegetal... mal.

Caso es, que hoy es día de poner esta canción, y ya está. Oi!



"If God came down on Christmas day, what would he think?
what would he say?
Would he notice all we've done?
Or just the battles seldom won?
I think I know what God would say, if he came down on Christmas Day.
He'd say to every boy and girl,
'Where's the Oi I gave to the world?"

Mr Winter arrives at

Son las cuatro de la mañana, no tengo sueño. Sí un calefactor que salva del sleeping mortal de la calefacción central, una jarra de cerveza llena de agua y tres capítulos de Friends, 3ª temporada, para pillar el sueño como fuera. Y miro por la terraza, y está nevando. Está nevando. ¿He visto nevar alguna vez aquí? Realmente, no así. Es mi maldita primera vez, está cayendo la de dios. Despego la nariz del cristal y me voy, entre bailando y haciendo aspavientos a lo fuckyeah! a por el abrigo y los guantes. De repente, mientras intento hacer una foto peleándome con el flash-no flash de la cámara, el viento cambia de dirección y el abrigo puesto sobre el pijama se empapa de blanco, las gafas se me quedan ciegas y la sonrisa de satisfacción se convierte en un mecagoendios.

Pero me quedo mirando cómo los coches de la calle O' Donnell van mucho más despacio, y juegan con el veo, ¿qué ves? de la geometría en el parabrisas. De repente esto no es Madrid, no es Mordor, no es generalización de un frío seco y sin nada que ofrecer. Tampoco es una de esas ciudades con casas de cuento, gente que ofrece galletitas de chocolate y coco y parques en los que no te avergüenzas para nada de tu extraña afición a la época victoriana ni a los libros de Jane Austen; aquí la nieve está sobre sitios que intentan cumplir esa misma función pero maldita sea, por una vez, no parece tan feo, tan mole, tan marcapasos.

Y ahora, porfaplis, que se pase pronto el jodido invierno.

To adress

Cuando esta canción comienza, el parecido a un corazón latiendo a toda pastilla es bastante evidente. O por lo menos, lo es si la escuchas con auriculares o altavoces realmente buenos, ésos que te sumergen en cualquier sitio menos en uno real.
Y esta canción, desde que la escuché hace ya unos curiosos años, siempre me ha dado escalofríos. Así, en un plan mariconada nerviosa. Mostrarme moñas gratis suele ser raro, a partir de entonces dije que era la canción de amor por excelencia en esa especie de puntitos débiles que cada uno tiene en su mapa.
Y a veces la he berreado y a veces la he gritado sin más pasión que la de poner voz de pito extra; el caso es que los escalofríos continuaban y yo siempre pensaba que quizá - quizá - llegaría el día en que pudiese escucharla con escalofríos de los que saben a todo menos a algo con una intensidad que, realmente, todavía no había bebido.

Entonces llega el rarísimo día en que la escuchas y los escalofríos son cosquillas tan placenteras como si la serotonina andase de nocheviejas varias, con cartelitos de "Don't You Wo!" y el mundo fuese una bolera inmensa donde las personas son bolos y todo cristo nació sabiendo patinar.

Todo esto después de un reniego constante y varias - bastantes - lavadoras de ropa de color. Después de todo, no es que existan los derechos a reír o a llorar. Existe la posibilidad de que hagas las dos cosas, y tú eres el que verá qué viene a continuación. A mí lo que me sorprende, lo que me deja boquiabierta es toda esa parafernalia de casualidades. No parecía que fuese X, no parecía que fuese en el tiempo Y, no querías que el resultado fuese Z porque tu razonamiento para pensar a fondo la situación que planteaba la pregunta estaba entretenido no sé si en mirar moscas, pensar en la oferta de donettes o ser el papel higiénico con ojos, boca y manos que se deleita con un buen helado sabor mierda.

E ironías de la vida, es increíble lo que giran los prismas, la base que sujeta al prisma y la tierra que mantiene a esa base. Un sólo cúmulo de circunstancias, y la bechamel sale de otra forma. No le falta sal. Está en su punto justo y yo empiezo a pensar en la característica de las piedras filosofales.

Cobardía y otros cuentos.

Crawled away from me, slipped away from me.
Tried to keep a hold but there was nothing I could say.
Slid away from me, crept away from me.
Tried to keep you down but there was nothing I could say.
So what you try to say is you don't want to play
But what you want and what you need,
don't mean that much to me.
I can see your back is turning, if I could I'd stick the knife in.

This is love
This is love
This is my love for you, this is my love.
Get you in a strangle hold baby,
Can you, can you get away?
What you tryin to say is you don't want to play,
What you want and what you need don't mean a fuck to me.
I can see your back is turning, if I could I'd stick the knife in.

Nobody's asking for a miracle. Quizá.

Es curioso que después de cuatro años y medio, que a estas alturas del viaje, de la escalera, de... la veintena, esos únicos y necesariamente divertidos diez años, no hayas logrado tener al lado a gente como la que está a 500 kilómetros, encontrados fácilmente allí, en su momento, en una ciudad siete veces menor a ésta, logrado empatía y confianza al segundo, con el único interés que el cachondeo y el sostenerse de por medio.

Me niego a creer que eso sea imposible aquí, me niego a creer que la experiencia del personal conocido haya sido un poquísimo tanto acertado de un enorme porcentaje, me niego a hundirme por este tipo de gilipolleces como son el considerar amigos a quienes realmente lo son, y si no lo son, no los hay. Y ciertamente, apenas los hay justo aquí, ahora, aquí al lado, justo aquí donde todo cuesta cien veces más que en la sweet sweet home, al tanto de una ida de olla cualquiera, de una sinceridad duradera más allá de diez sucesos variopintos; dios, estoy demasiado harta de todo este tema.

Me siento demasiado mal.

Supongo que desahogo off. One more time.

Puzzle

4.12.2008/09

http://www.youtube.com/watch?v=bYkXjsNGgIM

- ¿Es que vas a dejarlo?

Hubo un tiempo en que fue fácil implicarse. Las pilas recargadas en base a no se sabe muy bien el qué, el espíritu warrior incluso cuando no querías ni pararte a definirle a alguien qué coño significa eso, las ganas de aventura por los cuatro costados.

Ahora es como si una nublina espesa y tóxica hubiese invadido cada terreno que se ofrece ante tus ojos, pero, en un hilo de maricona esperanza, no sabes si lo inconcluso es el terreno, o el cristal de tu pantalla.

Oh, por dios, la verdad es que te importa un pito. Sólo quieres, sólo puedes si es más F que D. Más Fácil. Como si Fácil y Difícil se hubiesen convertido en analogías de escribo con la mano derecha, me río de la inutilidad de la izquierda, claves estúpidas con las que filtrar todo líquido que llegue a la habitación de procesado.

Y aquí estoy, hablando como el 90% de los apuntes de mi carrera, diciendo gilipolleces en términos cog - wait for it - cog, cog ... cognitivos.

Quieres, cuesta, intentas, no obtienes, te frustras; si llega el momento en el que de tanto esfuerzo consigues cero beneficios, que le cuenten a la santísima madre del Teo aquél que pasas cuatro kilos del culo de la suerte. ¿Hasta cuándo? Vete haciendo a la idea. O a la estrategia.

Baorgasm.